Archivo de la etiqueta: robótica/ロボット/robots

willy wonderborg

En nuestro edificio no se permiten mascotas orgánicas, así que tenemos este robot WonderBorg de Bandai. Se llama Willy. Es un robot que se mueve a su aire, calculando lo que tiene que hacer según un programa que le metes, y sus sentidos (sensores). El programa se hace con un “juego” de WonderSwan, una maquinita también de Bandai, parecida a la Game Boy de Nintendo, y se envía al robot por rayos infrarrojos.

En este video vemos como Willy intenta esquivar los obstáculos que ve con sus sensores de infrarrojos, girando hacia la dirección contraria al obstáculo. En caso de que una de las antenas se tope con algo, el robot retrocede y rectifica su trayectoria. El sonido que emite es diferente dependiendo del sensor que detecta el obstáculo.

Esta vez se puede apreciar que Willy tiene problemas con los huecos entre los tebeos.

Más sobre robots: Robótica en Fukuoka: Robosquare

今すんでいるビルは「ペット不可」だから、バンダイワンダーボーグというロボットを飼っています。名前はウィリー。センサーとプログラムに従って自分で動くことが出来るロボットです。プログラムはワンダースワン用ソフトを使って組むことが出来ます(ワンダースワンはゲームボーイに似たバンダイの携帯ゲーム機)。その後、赤外線でワンダーボーグに転送します。

このビデオは赤外線センサーによって障害物を避けるウィリーの姿です。障害物が見えたら反対方向に向かいます。また触角に何かが当たったら、少し戻ってから反対方向へと曲がります。障害物を見て認識した場合と、触角で触って認識した場合とでは、鳴き声も変わります。

今回は障害物と障害物の間にある隙間に惑わされるウィリーをご覧下さい。

In the building we’re living at, one can’t have pets so we have a Bandai WonderBorg called Willy. It’s an autonomous robot that moves depending on a program and what its sensors detect. The program is written using a piece of WonderSwan software (WonderSwan is Bandai’s handheld game system, and it resembles a bit a Game Boy). Then, you can transmit the program to the borg using infrared waves.

In this video we can see how Willy dodges the obstacles he can see with his infrared eyes, turning to the opposite direction. When anything touches its feelers, it will walk back a few steps and turn away from the obstacle. And it makes a different sound depending on which sensor detected the obstacle.

This time, we can see Willy has trouble with the gaps between the books.

Robótica en Fukuoka: Robosquare

El otro día tuve por fin la oportunidad de visitar tranquilamente Fukuoka Robosquare, un establecimiento dedicado a enseñar a toda Fukuoka lo que es la robótica. Los niños pueden interactuar con robots, los estudiantes y aficionados pueden comprar y consultar lo que quieran, y todos pueden disfrutar de forma gratuita de las exposiciones y los espectáculos con robots.

Nosotros pudimos ver cómo bailaban y cantaban un grupo de perritos robot Aibo (de los que había incontables modelos diferentes en exposición), o cómo hacían acrobacias un par de robots parecidos al de la foto de abajo.

Este es KHR-2HV, un robot con muchas articulaciones y servomotores, al que se le pueden programar patrones de conducta con un sencillo programa de ordenador. Esto quiere decir que no es un robot a control remoto, sino que toma sus propias decisiones para moverse según el programa y según lo que le dicen sus sensores (las máquinas que le sirven de sentidos).

A mí siempre me ha interesado hasta cierto nivel la robótica, desde que en la universidad hice un Picbot, un robot que había que montar prácticamente desde cero: diseñando (calculando) el circuito, construyendo lo que es el cuerpo del robot, y programando en lenguaje ensamblador un procesador de 8 bits.

Con este KHR-2HV vienen muchas cosas hechas, y es mucho más sencillo construirlo porque ya está diseñado. También es muy fácil de programar, de hecho no hay que saber ni ensamblador. Tiene muchas pijadas que yo nunca pondría a un robot hecho por mí, pero que en realidad pueden resultar muy cómodas. Y por 126000 yenes, creo que es más barato que un kit del Picbot.

Por curiosidad pregunté en el Robosquare por accesorios para el WonderBorg de Bandai, otro robot programable para aficionados, pero ya no tenían nada. Este robot de Bandai se puso a la venta hará unos 5 o 6 años, y era como diez veces más barato que el que os presento hoy. También tiene menos posibilidades de movimiento, pero las suficientes para experimentar con sus sensores y aprender a programarlo para que se defienda en tu alfombra. Lo más curioso es que tiene forma de escarabajo, y se programaba desde la máquina de juegos portátil de Bandai, WonderSwan.

Próximamente, más robotismo en este mismo blog.